Me decía en consulta un paciente que está intentando dejar de fumar, que antes de encenderse un cigarrillo, se preguntaba. ¿Reálmente me apetece tanto fumármelo?. Si la respuesta era afirmativa se lo fumaba, y si era negativa no se lo fumaba. Solo con ésta simple pregunta se estaba ahorrando muchos cigarrillos al día. Busca aquellas preguntas que te convega hacerte. ¿Por qué?. Porque te sienta bien.
Dra. Marisa Navarro
Autora del libro "La Medicina Emocional".