martes, 8 de noviembre de 2011

¿Por qué no?

Estamos tan influidos por los modelos, que tenemos modelos en todas las facetas de nuestra vida. ¡Y lo que nos cuesta soltar esos modelos!. Parece que si nuestra vida no se ajusta a ellos, todo está mal. Las cosas tienen que ser de una forma, parece que otras formas no nos valgan. Modelos que hemos heredado, modelos que hemos elegido, modelos que incluso hemos convertido en verdaderas creencias. Esta bien tener modelos, nos sirven de orientación. Pero si se convierten en caminos rígidos de vida, desechando todo lo que se salga de ellos, mejor reflexionar sobre ellos. Flexibilizarlos. Ampliarlos. Incluso desecharlos si son un lastre en nuestra vida. Y buscar nuevos modelos que nos sirvan, ¿por qué no?.

PSYSI

6 comentarios:

  1. Hoy es el primer dia del resto de nuestra vida , no ? . Pues éso , que no hay porque renunciar a la libertad de elegir en cada momento que modelo considero mas apropiado , que pauta o comportamiento me hará mejor persona ...

    ResponderEliminar
  2. Creo que los modelos en la vida te pueden ir bien. Yo lo que tengo son mucho modelos, si uno no me sirve echo mano de otro. Y seguro alguno me puede ir bien. Creo que los modelos son bunos.

    ResponderEliminar
  3. Mi modelo es la persona ideal que me gustaria llegar a ser y pienso que pensar debía - como Machado , como Serrat - en no olvidar nunca ese proposito ...

    ResponderEliminar
  4. Como modelo , modelo ... a mi me va Irina Shayk ...

    ResponderEliminar
  5. Es cierto que igual que los niños aprenden de lo que ven , es decir copian un poco como somos los adultos, a nosotros nos pasa igual, a veces copiamos de otros o de la imagen que nosotros nos hemos hecho de nosotros mismos, por eso es bueno pararse a pensar si uno está a gusto con esa imagen. Y sobre todo observar a los que son distintos a nosotros porque de ellos podemos aprender muchos, nuevos modelos de los que copiar cosas buenas que no tenemos.

    ResponderEliminar
  6. Creo que tengo que cambiar algunos modelos de mi vida.

    ResponderEliminar