Buscar la perfección en la vida te lleva a fijarte en lo que está mal en todo y en todos, a mirar sólo lo que no te gusta. Esto es algo que no nos hace ningún bien, cómo vamos a sentirnos alegres y felices si ponemos nuestra atención en lo negativo. En nuestra vida hay de todo, te lo aseguro, cosas que nos gustan, que nos encantan y cosas que no nos gustan nada, y por supuesto que aquellas que no nos gustan hay que mirarlas y ver qué podemos hacer para cambiarlas, pero con un propósito de mejora y crecimiento, no de perfección, y mientras lo intentamos, nos sentiremos mucho mejor si nos fijamos en las cosas buenas que tenemos en nuestra vida, que seguro que son muchas.PSYSI
Disfrutemos de lo que tenemos y no tengamos deseo de lo que no tenemos . Pongamos toda nuestra atención en lo que hacemos en cada momento , en lo que estamos sintiendo , en lo que estamos viviendo con ése proposito de crecimiento esforzandonos por hacer cada vez mejor las cosas y no veamos la perfección como una meta.
ResponderEliminarEnhorabuena PSYSI por su blog y espero que lo mantenga vivo durante mucho tiempo . Mi comentario es referente a lo que me sucede a mí y que me parece más común de lo que parece. Me preocupa enormemente la opinión de los demas y por éso siempre estoy buscando la perfección en todas mis relaciones ... con mis compañeros de trabajo , con mis amigos , con mis padres , etc. Si creo que alguién habla o piensa mal de mí quedo paralizado y bueno , por hoy , ya está bien. Saludos a todos y perdonen el pseudónimo.
ResponderEliminarEstamos en una sociedad en la que nos programan desde muy pequeñitos para alcanzar la perfección. Nosotros, a nuestra vez, participamos como sujetos activos en esta programación cuando tratamos con nuestros hijos, con nuestros colaboradores. Es normal, pues, que nuestra vida esté orientada a buscar la perfección... a pesar del enorme sufrimiento que esto puede llegar a causar.
ResponderEliminarTéngase presente que, hasta en los inocentes ---aparentemente--- Juegos Olímpicos, el lema "sagrado" motivacional es el de Citius, Altius, Fortius.
Salirse de la Carrera de la Perfección no es tarea fácil. nada fácil. Y, precísamente, quienes más difícil lo tienen son aquellos que han estado alcanzando realmente la perfección ---relativa, claro, pero perfección--- en todas sus actividades. Estas personas, que hasta un momento determinado de sus vidas han estado formando parte activa de la lucha por llegar a la cima, reciben ahora una reacción severa de desaprobación por parte de quienes les rodean, porque ahora pasan a intentar hacer las cosas simplemente bien. ¡Ojo, continúan haciendo las cosas bien!, pero ya no se dejan la piel en el intento... y, solo por eso, reciben la desaprobación que quienes, hasta ahora, venían siendo "servidores".
Pues eso, que sepamos bien claro que esas personas que desaprueban el abandono de la agotadora carrera de la búsqueda del más y mejor, eran, nada más y nada menos, que "aprovechados obscenos" de nuestro inhumano esfuerzo.
En una conocida serie de la BBC, "UPSTAIR, DOWNSTAIR", ambientada a principios del siglo pasado, el Ama de Llaves le dice al Mayordomo:
"Cuando los señores tienen apetito, yo ya he puesto la cena. Cuando los señores tienen necesidad de irse a descansar, yo ya tengo preparadas las habitaciones. Soy la criada perfecta. No tengo vida propia."
Nadie que nos ame de verdad dejará de aplaudir nuestro intento por vivir nuestra vida con algo menos de esfuerzo. Nadie que nos ame de verdad estará en contra de que deseemos tener una vida propia.